Próxima parada: Zonas Erógenas
Varias veces e comentado que nuestro cuerpo es como un parque de diversiones. Cuando llegas quieres montarte en todo, verdad? Así mismo el cuerpo espera a ser explorado. Todos tenemos zonas erógenas pero lo que le gusta a uno no necesariamente le gusta al otro.
Zonas erógenas que quizas conoces
Boca y Labios 🫦
Besar es un arte, y sugerimos usar cada centímetro de sus labios y boca como canvas.
Traza la forma de sus labios con tu lengua antes de pasar a un beso lento y húmedo, o chupa o mordisquea suavemente su labio inferior. Sorprende cuando sienta la sensación de Cosquilleo en sus labios.
Palma de las manos y puntas de los dedos🫴
Las yemas de los dedos son la parte del cuerpo más sensible al tacto, y las palmas de las manos no se quedan atrás.
Coloca tu mano debajo de la suya con la palma hacia arriba y hazle cosquillas en la palma con el dedo índice.
Si quieres aumentar la intimidad, mantén el contacto visual mientras lo haces.
Puedes elevarlo mucho mas tomando cada uno de sus dedos en tu boca, uno por uno, y chupando ligeramente.
Cuero cabelludo💆
El cuero cabelludo está lleno de terminaciones nerviosas, e incluso el más mínimo roce del cabello puede enviar hormigueo por todo el cuerpo.
Para aumentar el placer, pase las uñas suavemente por el cuero cabelludo, prestando especial atención al espacio detrás de las orejas y justo encima del cuello.
No te olvides del cabello. Tirar suavemente puede enviar olas de placer a través del cuerpo.
Orejas
Con una piel sensible en el exterior y cientos de receptores sensoriales en el interior, las orejas encabezan la lista de zonas erógenas para muchas personas.
Para una acción auditiva sexy que seguramente complacerá, intenta besar, lamer o mordisquear ligeramente los lóbulos de las orejas de tu pareja.
También puedes aprovechar esos receptores sensoriales susurrando o soplando suavemente en su oído para sentir más hormigueo.
Parte inferior de la espalda (sacro)
Podría tener algo que ver con el hecho de que los nervios en esta parte de la columna están conectados a la pelvis o el factor de vulnerabilidad de ser tocado por detrás que hace que esta área sea tan sensible.
Sea lo que sea, el más mínimo toque aquí puede evocar placer. Haz cosquillas en la zona con una pluma o con los labios y la lengua.
¿Te sientes aventurero? Pruebe con un cubito de hielo, un vibrador para un juego sensorial.
Ombligo y Estómago inferior
Estar peligrosamente cerca de los genitales hace que esta zona sea especialmente excitante.
Usa la lengua, las yemas de los dedos o incluso una pluma para trazar círculos alrededor del ombligo y dirígete hacia abajo y alrededor del estómago.
Este es un gran lugar para jugar con la temperatura, así que usa un cubo de hielo si a tu pareja le gusta.
Jugando solo? Acaricia el área para ponerte de humor.
Interior de brazos y axilas
¿Crees que las axilas no pueden ser sexys? Dos palabras: “Dirty Dancing”.
¿Conoces esa escena en la que Johnny pasa el dorso de la mano por el brazo de Baby, rozando su axila?
Ella se ríe al principio, pero una vez que pasa la respuesta de cosquillas, es totalmente caliente.
Un ligero toque es todo lo que necesitas para convertir las cosquillas en totalmente excitantes. Pase las yemas de los dedos, la lengua o incluso una pluma lentamente a lo largo de la parte interna del brazo hasta la axila.
Areola y Pezones
La estimulación del pezón ilumina la misma área del cerebro que los genitales.
Comience con un toque ligero, y todo vale aquí. Los labios, la lengua, una pluma o un pequeño vibrador son solo algunas ideas.
Traza alrededor de la areola antes de pasar al pezón y chupar, lamer e incluso sacudir. Sople o use un cubo de hielo para un poco de frescura sexy.
Si a tu pareja le gusta lo rudo, roza el pezón con los dientes. ¿Más rudo aún? Prueba con pinzas para pezones.
Detrás de la rodilla
Esta es otra área a menudo descuidada que es increíblemente sensible a cualquier tipo de contacto. Incluso es cosquilloso para algunos.
Preste atención especial al área durante un masaje, o use la boca y la lengua allí antes de subir o bajar por la pierna.
Muslos internos
La parte interna de los muslos es tan sensible y está tan cerca de la zona erógena definitiva que incluso un simple roce puede incendiar tus ingles.
Pase las yemas de los dedos por la parte delantera de los muslos, moviéndose lentamente hacia adentro mientras besa sus labios, cuello y pecho.
Cuando esté listo para conocer de cerca y en persona, cubra el área con besos y lametones suaves y húmedos.
Parte inferior de los pies y los dedos de los pies
Los puntos de presión en la parte inferior de los pies pueden aumentar el flujo sanguíneo y mejorar la sensación de excitación cuando se manipulan correctamente.
Experimente con diferentes presiones al masajear los pies, comenzando suavemente y trabajando más profundamente hasta que encuentre lo que funciona.
Si a ambos les gusta, alterne entre masajear y lamer el pie. Pasa a chupar suavemente cada dedo del pie, uno por uno.
Montículo púbico
El monte de Venus, el montículo carnoso justo encima del clítoris, es rico en terminaciones nerviosas que están conectadas a los genitales. Masajear el área con un movimiento hacia arriba y hacia abajo puede estimular indirectamente los labios y el clítoris.
Si tu pareja está dispuesta a más, continúa besando el área, luego usa la punta de tu lengua para lamer hacia abajo. Si estás jugando contigo mismo, masajea o vibra para aumentar tu excitación.
Clítoris
Este pequeño botón de placer contiene más de 8000 terminaciones nerviosas y está cubierto por una capucha. Tómelo suavemente entre tu dedo índice y medio y deslíza lentamente con un movimiento hacia arriba y hacia abajo.
Quieres más? Usa tus dedos o un vibrador de clítoris y frota tu protuberancia con una ligera presión. Experimenta con la dirección y el tempo para encontrar lo que se siente mejor.
Para una buena acción de la lengua, comienza despacio y aumente la velocidad y la presión.
Punto A
La parte inferior de la abertura vaginal está llena de terminaciones nerviosas con carga erótica y alberga el fórnix anterior (punto A).
Usa los dedos, un consolador o el pene para penetrar la vagina y concentre la presión en la pared frontal mientras se desliza hacia adentro y hacia afuera.
Punto G
El punto G es una zona capaz de provocar lo que se conoce como eyaculación femenina. Los dedos o un vibrador curvo del punto G son tu mejor opción para alcanzarlo.
Con una buena cantidad de lubricante, gire el vibrador o el dedo hacia arriba, hacia el ombligo, y muévalo con un movimiento de "ven aquí".
Encuentre lo que se siente bien y manténgalo, permitiendo que la sensación se desarrolle.
Cuello Uterino
Una persona necesita estar completamente excitada para disfrutar de la estimulación cervical, por lo que los juegos previos son imprescindibles.
Cualquier posición sexual de penetración profunda puede hacerlo. El estilo perrito es bueno y también se puede realizar con un consolador con correa o normal. Cuando encuentre una profundidad y un movimiento que se sienta bien, continúe.
Los orgasmos cervicales son similares a lo que se llama un orgasmo de cuerpo completo en el sexo tántrico, por lo que te espera un placer si puedes llegar allí.
Que zona erógena descubriste?